La Vodka de Puerto Rico duplica su capacidad de producción y sus puertas de la mano de Puerto Rico Supplies Group
El mundo es de los que sueñan en grande, qué bonita frase. No cabe duda de que muchos se identifican con este mensaje y resuena cada vez con más potencia en Puerto Rico, donde todos los días nace un(a) nuevo(a) emprendedor(a).
Precisamente, cuando hablamos de emprender, Carlitos López Vidal y Claudia Ferrer Tañón, fundadores de BRAVADA, la vodka de Puerto Rico, podrían muy bien dar cátedra.
Ambos irían tal vez más lejos- porque si algo han experimentado de primera mano en este último año, es que el mundo es de los que se atreven a materializar sus grandes sueños.
De cara a su primer aniversario, López y Ferrer toman una pausa para reflexionar sobre lo que ha significado ser pioneros, ser bravos y arriesgarse en una industria de por sí intimidante, mantenerse íntegros en su intención y el significado del lanzamiento histórico de BRAVADA desde el marco cultural en la fibra de la Isla.
Es decir, lo que representa ese orgullo compartido de crear una vodka hecha en Puerto Rico para los puertorriqueños y apostando a lo de aquí, o mejor dicho, como lee el lema de su famosa campaña- #ladeaquí.
"Sabemos que en la Isla se producen los mejores espíritus destilados, pero hacía falta añadir un producto Premium que contara una nueva historia sobre lo que puede lograr Puerto Rico, una historia que hable de nuestra resiliencia, y nuestro espíritu valiente. Con BRAVADA, identificamos la oportunidad de crear la primera y única vodka de Puerto Rico. Un producto local, único y genuinamente de alta calidad, un hilo conductor, que nos uniera como pueblo en cada celebración, sea en una boda o en un juego de baloncesto”, dice Ferrer, CEO y portavoz de BRAVADA.
Por su parte, López explica que la vodka es el espíritu destilado más versátil y fácil de mezclar. “Ya era hora de que Puerto Rico tuviera su propia vodka, se la merecía. No ha sido una tarea fácil-por el contrario, tomó años afinar la fórmula perfecta, sin atajos. La complejidad de los retos es indescriptible, pero los logros suman más a la ecuación y definitivamente ha valido la pena”, asegura el genio detrás de la fórmula destilada artesanalmente a mano en alambiques de cobre y lotes pequeños para mantener los más altos controles de calidad y lograr ese acabado único y sedoso al paladar.
“Es bien emocionante escuchar el feedback de las personas y verlos pedir un trago con BRAVADA, ya no tienen que consumir algo importado porque no había alternativas. Cuando alguien abre una botella de BRAVADA, está frente a una vodka Premium, suave, exquisita y sin gluten, gracias a su base de maíz", puntualiza.
Con una capacidad de producción de 60,000 cajas al año y disponible en más de 1,700 puertas (que incluyen cadenas reconocidas, grandes supermercados, farmacias, gasolineras, restaurantes, barras y hoteles) los números hablan por sí solos. No es casualidad que ya sea una de las favoritas en el mercado y que el consumidor local reconozca a leguas la famosa botella con tonos azul turquesa que sobresale de las demás y llama mucho la atención hasta convertirse en jugoso tema de conversación.
“Después de todo, BRAVADA significa acto de valor, así que había que atreverse a ser diferentes; ese sentimiento está engranado y se refleja en todo lo que toca la marca, comenzando por la etiqueta misma. La inspiración fueron las playas de Puerto Rico. Al frente se observa el alambique de cobre donde se destila nuestra vodka, además se aprecian las boas puertorriqueñas que representan nuestra gallardía, y a la vez, la serpentina de cobre para el enfriamiento y condensación dentro del alambique", añade Ferrer.
Es esta la botella que hoy genera más de 15 empleos directos y con su corto tiempo ya ha ganado market share con miras a crecer agresiva e ininterrumpidamente, lo que significa que no solamente van por buen camino, sino que están labrando el propio.
Y, no han estado solos. Los cobija el coloso de los distribuidores y marcas líderes Puerto Rico Supplies Group; una empresa familiar puertorriqueña capitaneada visionariamente por el empresario Edwin Pérez, quien apuesta al talento sin titubear.
"Distribuir BRAVADA es un gran orgullo. Es el primer y único vodka Premium totalmente hecho en Puerto Rico, que demuestra la fuerza, el conocimiento y la capacidad de triunfo de dos jóvenes empresarios locales. Claudia Ferrer y Carlos López no solamente están construyendo una marca, sino un legado para Puerto Rico”, dijo Pérez.
Bajo este marco de referencia, el futuro luce resplandeciente y alentador para BRAVADA. Entre sus planes cercanos proyectan terminar un año sólido, cerrando fuerte, duplicando las ventas y aumentando las puertas del año pasado. "BRAVADA Vodka, llegó para quedarse. Queremos que los puertorriqueños sean parte de este movimiento, de esta comunidad creciente que apuesta por Puerto Rico. Se avecinan eventos y activaciones de todo tipo para que los consumidores tengan la oportunidad de disfrutar de la de aquí, la vodka de Puerto Rico", afirma Imaris Arocho, CMO de la marca. A juzgar por el éxito sin precedentes que se han ganado a puro pulmón, no cabe duda de que el universo está de su lado y conspirará a su favor.