Drama entre la forma, función y emoción

Cuando se unen tres grandes visionarios de nuestro país, nace la magia en todos sus sentidos. Mario Pagán, Nono Maldonado y George Stewart se dieron a la tarea de presentarnos MĀRO, un nuevo restaurante de cocina pacífico-latina que ofrece una experiencia única en una atmósfera escenográfica, contemporánea y sensorial, donde cada elemento —desde la madera y la iluminación, hasta la experiencia gastronómica y el arte— cuenta una historia sin palabras.
En MĀRO, la visión dramática de Mario y Nono fue canalizada por Stewart de S. Arch con un enfoque arquitectónico que transformó un espacio en Santurce, oscuro y monumental en una experiencia íntima. A través del uso de maderas, distintos niveles y una escalera escultórica que sorprende desde la entrada, el diseño logra un balance entre teatralidad y cercanía. El salón privado elevado, solicitado por el chef, permite disfrutar de privacidad sin desconectarse del espectáculo general.
Con raíces japonesas, el nombre MĀRO, que significa “yo mismo”, es una representación estilizada de la identidad y evolución personal del chef. El concepto está anclado en la autoexpresión y la convergencia cultural, y da vida a un estilo culinario único acuñado por el propio Pagán.
Para Nono Maldonado, MĀRO representó la oportunidad de traducir la propuesta Pacífico-Latina sin recurrir a clichés. “Cuando Mario me habló de su concepto, supe que debía pensar en capas. Busqué un motif que se pudiera repetir de principio a fin y que se sintiera como parte del espacio, no como una decoración añadida.”— Nono Maldonado

El jugo de composición de líneas rectas evocan caracteres japoneses y chinos, llevando un “orientalismo contemporáneo” al lenguaje espacial de MĀRO. El plafón fue su punto de partida: inspirado en la caligrafía japonesa y china —trazos rectos, sin curvas— creó una cubierta lineal y rítmica que se extiende por todo el restaurante. Esta idea se replica en paneles de madera cálida que envuelven el espacio, suavizando su escala. El papel texturizado tipo crosshatch aporta profundidad y ritmo.
Una de sus áreas favoritas es la barra, marcada por un plafón en voladizo y una lámpara dorado-champán inspirada en El Fantasma de la Ópera. El recorrido culmina en el maki bar, al fondo, donde espejos estratégicos amplifican la experiencia. Nos cuenta Nono “No tienes que virarte para saber lo que está pasando. Los espejos te lo cuentan todo; es parte del juego de ver y ser visto que quisimos lograr.” — Nono Maldonado.
En nuestra conversacion con el arquitecto George Stewart nos cuenta como “En MĀRO, la arquitectura funciona como una coreografía entre forma, función y emoción. La cocina, estratégicamente se posicinó atras permitiendo abrir el espacio sin perder eficiencia operativa, mientras que elementos como la escalera escultórica adosada a la pared lateral y el salón privad se integran para elevar la experiencia gastronómica. Cada detalle fue diseñado para resaltar al comensal como protagonista, permitiéndole ver y ser visto en un entorno que celebra la teatralidad de la hospitalidad.” —George S. Stewart AIA CAAPPR LEED® GA
La paleta de colores, compuesta por seis tonalidades suaves —blancos, taupes y cremas— ofrece una base envolvente. Como acento, Nono evitó el rojo tradicional y optó por un coral inspirado en el salmón crudo, reflejando el menú y aportando identidad al branding, signage y detalles decorativos.

¿Quién pensaría que las columnas estructurales del espacio —originalmente frías y monumentales— se transformarían en piezas de arte texturizadas? Nono Maldonado intervino estas columnas como si fuesen tótems japoneses, envolviéndolas en photoboards manipulados con una mezcla de imágenes y elementos gráficos que evocan movimiento, sensualidad y capas de narrativa visual.
Finalmente, el arte: la escultura central de Luis Torruella interpreta el lenguaje visual del diseño y se convierte en pieza focal en mobiliario hecho a la medida. Lámparas colgantes de Kateryna Sokolova, y obras de arte de artistas puertorriqueños Sofía Martínez, José Jorge Román y Raimundo Figueroa aportan profundidad emocional y autenticidad conectiva. Un espacio y una experiencia que no te puedes perder.

“MĀRO es la culminación de un viaje de toda una vida—un sueño finalmente hecho realidad,” expresó el chef Mario Pagán. “Representa todo lo que he aprendido, sentido e imaginado a lo largo del camino. Desde mis restaurantes anteriores como Lemongrass y RAYA hasta los viajes que ampliaron mi paladar por todo el Pacífico, este restaurante es mi forma de contar historias a través del sabor. No se trata solo de comida, sino de crear momentos que perduren mucho después del último bocado.”