Por Arq. / di. Edwina González / e.go

¿De qué manera nuestros espacios comerciales activan nuestros sentidos y nos infunden felicidad? Utilizando el enfoque de la Neuroarquitectura, es importante crear espacios comerciales que además de ser resueltos a nivel estético, tengan un impacto positivo en la experiencia del cliente.

Este mes de marzo, reflexionemos sobre los espacios comerciales y cómo se considera cuidadosamente la disposición de distintos elementos para guiar de manera intuitiva al usuario. El flujo de circulación claro y una distribución estratégica de productos o servicios pueden mejorar la comodidad y la facilidad de movimiento en el espacio. Además de los siguientes:

Iluminación

Factor clave en la creación de la atmósfera. Se debe utilizar iluminación natural siempre que sea posible. La iluminación artificial se debe diseñar y elegir su color cuidadosamente ya que esta afecta el estado de ánimo de todo usuario del espacio.

Materiales & texturas

Responsables en gran medida, de crear una conexión emocional con el espacio y los productos o servicios que se ofrecen.

Acústica

Se debe considerar meticulosamente en espacios comerciales para asegurar un ambiente sonoramente agradable. Un control adecuado del ruido, así como la selección de música de fondo contribuye a una experiencia de compra más placentera y relajante.

En resumen, la Neuroarquitectura aplicada a espacios comerciales, busca no solo impresionar visualmente, sino también crear una experiencia multisensorial que influya con emociones positivas el comportamiento del cliente. Cada decisión de diseño está cuidadosamente pensada para fomentar la comodidad, la interacción y la conexión emocional lo que, en última instancia, se traduce en una experiencia de compra más satisfactoria y memorable.