Diseño por: Luisa Escobar y Connie Duprey

 

Trendy, una marca con más de 10 años en el mercado, comenzó en el área de Gurabo, Puerto Rico. Con el propósito de evolucionar en el mercado del estilismo en el área metropolitana, la joven pareja dueños de la compañía se enfocó y especializó en la revolución del color. Así surge el nombre del nuevo salón: The Color Society by Trendy, ubicado en Hato Rey.

 

Ser “trendy” es estar de moda y muy al día con las tendencias. Entrevistamos a las diseñadoras de interiores Connie Duprey y Luisa Escobar, quienes nos explican: “Nos enfocamos en el nombre y lo usamos como inspiración para la creación del concepto. Queríamos un elemento de impacto para esa primera impresión cuando entras en el espacio”. El diseño de esta pieza de impacto se basó en un juego de líneas realizado con tablones de madera que suben verticalmente y, al tocar el techo, siguen camino por el plafón para coronar el área de recepción. De éstas bajan dos modernas lámparas de estructura tubular dorada y globos de cristal. La T: logo de la compañía, también realizada con tablones de madera auto iluminados, queda empotrada en la pared de fondo. Definitivamente se logró el impacto visual de primera impresión al entrar al área de recepción del salón.

 

 

"Nuestro 'material board' incluyó la madera en varios tonos, losas que simulan cemento expuesto, mármol, — materiales de aspecto orgánico que contrastan con los metálicos dorados de lámparas, estantes y accesorios — el color negro como base de varias paredes para acentuar varios elementos y, claro, color en el papel decorativo, en el letrero de neón y en los productos del salón como tal."

 

Todo proceso de diseño conlleva establecer parámetros, preferencias, necesidades y presupuesto. Durante la primera reunión con los propietarios escuchamos, conversamos, estudiamos y aceptamos el gran reto de distribuir los 1,200 pies cuadrados del local donde debíamos colocar siete estaciones para estilistas, tres “shampoo bowls”, un “color bar”, dos estaciones de manicura, dos de pedicura, anaqueles para venta de productos, “coffee bar”, cocina, “laundry”, espacio de almacenaje y baño. Los dueños también nos hablaron de colores; entre ellos el rosado y el turquesa. Hablamos de acabados, como los metálicos dorados y otros detalles de estilos que eran atractivos para la imagen que visualizaban para el salón.

 

 

 

Ellos querían enfocarse en impactar a sus clientes desde su llegada al salón. También, por el gran auge de la tendencia de publicar experiencias en las redes, otro factor muy importante en el “wish list” fue el incluir diferentes áreas con personalidad que sirvieran de fondo para que sus clientes se tomasen fotos divertidas que les motivara a colocarlas en sus redes sociales. Esta tendencia unida al apoyo de su clientela sirve también como herramienta de mercadeo para el negocio.

 

El salón debía tener un aspecto moderno y que, a su vez, perdurara en el tiempo. El mayor reto fue lograr complacerlos de la mano de un presupuesto. Para poder lograr nuestro objetivo y mantenernos en presupuesto, decidimos mantener el piso existente. En base a esto, nos tocaba hacer una selección de piezas que fueran acorde con el piso existente e integrarlo en nuestro concepto de diseño para complacer a nuestros clientes con la apariencia estética que aspiraban y cumplir todos sus deseos.

 


 

The Color Society by Trendy, is a new beauty salon located in Hato Rey.

 

We interviewed interior designers Connie Duprey and Luisa Escobar, who explained: “We focused on the name and used it as inspiration for the creation of the concept. We wanted an element of impact for that first impression when you enter the space ”. The design of this striking piece was based on a game of lines made with wooden planks that rise vertically and, when they touch the ceiling, continue their way through the ceiling to crown the reception area. From these come down two modern lamps with a golden tubular structure and glass globes. The T: company logo, also made with self-illuminated wooden planks, is embedded in the back wall.

 

In the 1,200 square feet of the premises we had to place seven stations for stylists, three shampoo bowls, a color bar, two manicure stations, two pedicures, shelves for selling products, coffee bar, kitchen, laundry, Storage space and bathroom.

 

Our material board included wood in various shades, slabs that simulate exposed concrete, marble, - organic-looking materials that contrast with the golden metallics of lamps, shelves and accessories - the black color as the base of various walls to accentuate various elements and, of course, color in the decorative paper, in the neon sign and in the products of the room as such.