Por Di. Adriana Cañellas Morini
Les tengo que decir que cada año que pasa seguimos viendo el uso y reúso de biomateriales. Aunque estos mayormente se derivan y fabrican a partir de subproductos que se encuentran en la industria agrícola, no es un proceso fácil ni económico a seguir, sin embargo, nos vuelve locos.
El diseñador Fernando Laposse trabaja con las hojas de maíz para desarrollar Totomoxtle. Este es un nuevo material de revestimiento elaborado con cáscaras de maíz tradicional mejicano. Honrando la gastronomía tradicional mejicana, el uso de los elotes nativos del país es una belleza por su variación de color. Lamentablemente, debido a la globalización, la cantidad de variedades nativas de maíz mejicano está amenazada. La única esperanza real de salvar esta especie ancestral reside en los pueblos indígenas de Méjico, que plantan el maíz según la tradición.
Trabajando en asociación con la comunidad de Tonahuixtla en el estado mejicano de Puebla, Totomoxtle está ayudando a regenerar prácticas agrícolas tradicionales y establecer una nueva artesanía que genera ingresos para los agricultores empobrecidos.
Como diseñador, a Fernando le preocupa la sostenibilidad, la biodiversidad, las comunidades marginadas y la política alimentaria. Su trabajo se basa en la ubicación de un material y abarca narrativas tanto culturales como históricas.
The designer Fernando Laposse works with corn husks to develop Totomoxtle. This is a new lining material made from traditional Mexican corn husks. Honoring traditional Mexican cuisine, the use of the country’s native corn is beautiful for its color variation. Totomoxtle is helping to regenerate traditional agricultural practices and establish a new craft that generates income for impoverished farmers.